Seguimos igual y seguiremos
Las nuevas leyes parece que no tienen mucha cabida en Carballiño por lo que se ve. Lo de no fumar en terrazas ni cerca de otras personas se lo siguen pasando por el forro todo el mundo. Lo de no llevar atado y con bozal el perro igual, lo de recoger sus cosas ya ni te cuento. Y lo de circular a 30 o a 20 dependiendo de la calle se ve que tampoco.
El otro día una energúmena al volante de un volvo rojo de los nuevos se me puso hecha una fiera porque pobre de mi iba en bicicleta por el medio del carril, será que no puedo hacerlo en ciudad. A mayores le diría a esta señora que iba a 30 km/h. con lo que ya voy al limite de la velocidad máxima, cosa que rebasó con creces al adelantarme y que si llega a estar un radar la risa no me iba a pasar en un mes, a ella estoy seguro que no le iba a hacer gracia ninguna.
Ese mismo día, volviendo de un viaje, entre con mi coche obviamente a 30 km/h., pero el que venia detrás se le quemaba la cena porque no se cansó de hacer sonar el claxón, y más en la zona del Gadis donde hay múltiples pasos de cebra, será que dan premio si atropellas a alguien.
Así que me pregunto si en Carballiño la gente está tan sumamente estresada como para comportarse de esta manera o es que simplemente son tan antisociales, incívicos y maleducados como hacen ver. Lógicamente, la mayor parte de estes problemas son del consistorio quien tiene que poner orden y hacer cumplir las normas.