Sobre un incidente violento en Vilamoure

La realidad virtual produce espejismos y es capaz de hacernos creer lo que no existe o de hacernos percibir la realidad real al antojo de cualquierr emisor que deliberadamente manipula.

Es lo que ocurre con esta supuesta asociación Matar por Matar, cuya foto de familia se limita a la foto carné de su único miembro, que se cree sus propias argucias y mentiras, aunque eso sí, nunca le faltaron socios que a modo de matrimonio de conveniencia, se sumase a su vorágine ideológica, a la turbulenta forma de abastardar los principios fundamentales de las filosofías conservacionistas que las asociaciones ecologistas de toda la vida promulgan. Claro que sta suerte de personajes tiene de ecologista lo que un burro de aeropoano. Lo que sucede es que los medios de comunicación y por ende gran parte de la población no es capaz de diferenciar entre activismo conservacionista y animalista radicalizado, dos tendencias ideológicas opuestas y a manudo enfrentadas.

Sus aliados, los de antes y los de ahora, deben de estar con las meninges inflamadas a la vista de los nuevos acontecimientos cuando el único miembro de la asociación amiga, el mentor de trifulcas, el artista es detenido como presunto autor de un delito de lesiones. ¡Toma!

Valga como ejemplo del proceder de este hechicero del sofisma su comentario: 

VILA, UN PERRO ABANDONADO.

En lugar de utilizar el término ENTREGADO utiliza ABANDONADO, algo que también se podría aplicar a él mismo: se va de vacaciones un mes a Brasil y deja a andonados en su casa 9 perros al cargo de una mujer que no los saca a pasear y solamente los visita una vez al día.

Como buen encantador de perros se atreve con la etología clínica y a distancia diagnostica que "el comportamiento del perro siempre deriva de una mala educación por parte del dueño". Vamos que los problemas orgánicos como la alteración hormonal o un simple dolor de muelas no tiene  cabida en el manual de este célebre animalista, como tampoco las disfunciones psíquicas como la agresividad por domimancia o la ansiedad por separación. 

¡Siempre es culpa de la mala educación dada por el dueño! Claro que si se trata de criminalizar al personal del colegio Vila do Arenteiro no puede ser de otra manera.

En su batalla contra el infiel, el sacrosanto animalista, el ilustrado y clarividente hombre-asociación se refiere a la perrera como "campo de concentración" en su intento de mancillar el servicio para postularse a favor de sus nuevos aliados que "venden" perros en adopción y excitan la susceptibilidad para recaudar euros. ¿Cuanto recaudarían a costa de Vila?

Estoy de acuerdo contigo, ferviente animalista, en que no siempre lo legal es ético, de la misma forma que la mentira, la hipérbole malintencionada y tendenciosa es siempre inmoral, como inmoral es pretender que todos piensen como tu y tus aliados, porque detrás de vuestra intransigencia se esconde un odio que está a un paso de la violencia y luego ocurre lo que ocurre.

Intransigente animalista, ahora mismo eres presunto autor supongo en breve serás reo, pero siempre fuiste víctima de tus perturbadas ideas.