De todos son conocidas las múltiples facetas profesionales del 
alcalde de Boborás y que como responsable del concello ni siquiera se mueve 
un papel de una mesa a otra sin su aprobación o que cualquier decisión y 
trámite en el concello debe contar con su visto bueno. Lo que sí nunca 
había oído antes es que al alcalde de Boborás ejerciera también de 
técnico jurídico del concello, pero ahora que parece ser que es así ya se 
entiende el porqué de esa peculiar interpretación que se hace de la 
legislación en esa administración (que siempre termina favoreciendo a 
vecinos afines) o el hecho de que a pesar de que una sentencia judicial 
ordena que se tiene que un presentar proyecto de demolición el concello 
admite a trámite un proyecto de ejecución de obra. Pero seguramente y a la 
vista del informe jurídico del alcalde de Boborás, seré yo quien esté en 
un error o habré leído mal el art. 118 de nuestra constitución que dice 
que es obligado cumplir las sentencias judiciales. Al menos en Boborás 
parece que no lo es.
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