Considero excesivamente exagerado el ataque anterior a una concelleira del PP de Maside. De la foto publicada tan solo se ve un contenedor saturado, y escasos elementos adyacentes al contenedor, sin ocupar la acera, pero sí el espacio adyacente al propio contenedor.

No puedo deducir de esa foto una conducta desordenada, ni cualquier otra que merezca reproche moral, ni cívico ni de ninguna índole. No existe otro lugar para echar la basura que un contenedor, a no ser que el denunciante sugiera que se entierre en alguna finca, como ya se ha hecho.

No puedo deducir de la información aportada que la concelleira no haya hecho una llamada a la cuadrilla de limpieza advirtiendo de la situción excepcional, y de la saturación del contenedor por tales contingencias. Lo cual sería pertinente. En lo demás no aprecio ninguna conducta moral o cívica digna de reproche.

Y no se equivoque, no se lo dice una persona que quiera defender a la concelleira (aunque guarde una relación cordial de vecindad con ella). Se lo dice una persona que en su día denunció que ese local ocupaba un jardín público. Se lo dice una persona que denunció que otro local ocupaba una vía de dominio público. Y aprovecho la ocasión para denunciar que absolutamente todos los locales ocupan las aceras impidiendo la circulación peatonil (que ha de esquivar las terrazas ocupando la calzada).

Una cosa es denunciar hechos objetivos, irrefutables, y otra cosa es hacer ataques ad hominem. A mí me resultó desagradable hacer aquella denuncia, porque detrás estaban personas a las cuales aprecio. Pero eran hechos objetivos irrefutables. Esto está cogido con pinzas, si me lo permite.