Siguiendo en la línea de mi fascinación por esta tierra y las cosas que tan gratamente me sorprendieron, la segunda de ellas, después de la Veracruz, fue el pulpo, ¿cómo podía ser que en una zona de interior se comiese el mejor pulpo ?, era un tanto contradictorio…fue probarlo y convencerme, tanto que incluso en un viaje que hice a mi tierra tras unas semanas aquí, coincidí en el tren con dos señores, creo recordar que de A Coruña, que conversaban sobre gastronomía, refiriendo que el mejor sitio para comer pulpo era allí, en no sé que bar enfrente de alguna estación; y ni corta ni perezosa